ÚLTIMA HORA: El encuentro entre Donald Trump y Vladimir Putin en Alaska ha desatado una ola de reacciones en Europa, que observa con inquietud este saludo histórico. Las imágenes, que han comenzado a circular rápidamente, muestran a Trump y Putin descendiendo de sus respectivos aviones en un protocolo casi sincronizado, marcando el inicio de una cumbre que podría redefinir las relaciones internacionales.
Putin llegó acompañado de cazas rusos y norteamericanos, así como de seis barcos de guerra rusos que rodeaban Alaska, un despliegue militar que no pasa desapercibido en el contexto de tensiones globales. La llegada de ambos líderes ha generado un clima de expectativa y preocupación, especialmente ante la posibilidad de que se discutan acuerdos cruciales en medio de sanciones y conflictos en curso.
El saludo entre los dos mandatarios, capturado en imágenes que ya están dando la vuelta al mundo, es un momento que muchos consideran simbólico. Sin embargo, los analistas advierten que la reunión no será un encuentro uno a uno, sino que contará con la participación de otros altos funcionarios, lo que podría complicar las negociaciones. La decisión de Trump de incluir a sus asesores en la conversación sugiere una cautela ante la figura de Putin, cuya influencia sigue siendo un tema candente.
Mientras los líderes se preparan para una larga reunión, la prensa ha comenzado a gritar preguntas incisivas sobre el alto el fuego y la situación en Ucrania, pero hasta el momento, no ha habido respuestas. Este encuentro, que muchos consideran un punto de inflexión, podría tener repercusiones significativas en la geopolítica mundial.
Con la presión sobre ambos líderes para alcanzar un acuerdo tangible, el mundo espera ansiosamente los resultados de esta cumbre. La situación es crítica y el tiempo apremia. ¿Lograrán Trump y Putin encontrar un terreno común, o se intensificarán las tensiones? La respuesta podría cambiar el rumbo de las relaciones internacionales en los próximos días.