**El Trágico Final de Ramón Ayala, 80 años | La hija “el Rey del acordeón” lloró mucho**
En una conmovedora jornada que ha dejado a la comunidad musical en estado de shock, el icónico Ramón Ayala, conocido como “el Rey del Acordeón”, ha fallecido a la edad de 80 años. Su hija, visiblemente afectada, compartió su dolor con el mundo, revelando que ha llorado profundamente por la pérdida de su padre, cuya vida fue un testimonio de pasión y dedicación a la música norteña.
Nacido como Ramón Cobarrubias Garza el 8 de diciembre de 1945 en Monterrey, Nuevo León, Ayala se convirtió en una leyenda en la música regional mexicana, llevando su talento con el acordeón desde los humildes campos de algodón hasta los escenarios más grandes de Estados Unidos. Su trayectoria de casi 50 años transformó baladas folklóricas en himnos inolvidables, y su estilo inconfundible resonó en los corazones de millones.
Desde sus inicios, la vida de Ayala estuvo marcada por desafíos. Creció en una familia de escasos recursos y enfrentó la separación de sus padres, lo que lo llevó a trabajar desde joven para ayudar a su familia. Sin embargo, su amor por la música nunca flaqueó. A lo largo de su carrera, formó parte de agrupaciones legendarias como Los Relámpagos del Norte y Los Bravos del Norte, dejando un legado imborrable en el género.
A pesar de los altibajos, incluyendo controversias y la pérdida de seres queridos, Ayala siempre encontró la manera de reinventarse y seguir adelante. Su última etapa en la música, marcada por una gira que prometía un nuevo comienzo, ahora queda como un recuerdo de su incansable espíritu.
La noticia de su fallecimiento ha desatado una ola de tributos de admiradores y colegas que lo consideran un pionero y un símbolo de la música norteña. Ramón Ayala no solo fue un artista, sino un faro de esperanza y resiliencia para muchos. Su legado perdurará en cada acorde de su amado instrumento, el acordeón.