**Trump juega con fuego: la presión contra Powell se vuelve exagerada y este podría ser el grave error**
La tensión en torno a la Reserva Federal de Estados Unidos alcanza un punto crítico. Esta mañana, Jerome Powell se prepara para pronunciarse en un momento decisivo, una semana antes de la crucial reunión de política monetaria. La presión ejercida por la administración Trump, encabezada por el secretario del Tesoro Scott Besen, ha llevado a solicitar una investigación sobre la institución, lo que podría tener consecuencias devastadoras para la economía nacional.
Besen ha declarado que la independencia de la Reserva Federal es esencial para la estabilidad del país, pero que está amenazada por las intromisiones políticas. Las críticas de Trump hacia Powell han intensificado la presión, y los mercados ya muestran signos de nerviosismo, con caídas en las bolsas de Europa y Asia. La clave del día recae en las palabras de Powell, que se espera que hable a las 8:30 AM, hora de Nueva York.
La portavoz de la Casa Blanca, Levit, asegura que no hay planes para despedir a Powell, pero el clima de incertidumbre es palpable. Los economistas advierten que la presión sobre Powell para bajar las tasas de interés podría resultar en un grave error, exacerbando la inestabilidad económica. El riesgo es real: un cambio en la política monetaria podría desencadenar una caída en el mercado de valores que supere el 5% en el corto plazo.
Mientras tanto, el mundo observa. La economía global se desacelera, y las tensiones comerciales aumentan, lo que añade una capa de complejidad a la ya volátil situación. La administración Trump, mientras se jacta de logros económicos, podría estar jugando con fuego, ignorando las señales de advertencia que podrían llevar a una crisis. El reloj avanza y el 1 de agosto se acerca, un mes que podría definir el rumbo de la economía estadounidense y global. La pregunta es: ¿será Powell capaz de resistir esta presión o se convertirá en la víctima de un juego peligroso?