**Título: El Impactante Testimonio del Camionero que Presenció la Tragedia de Diogo Jota y su Hermano**
En una revelación desgarradora, el camionero portugués José Aleiso Duarte ha roto el silencio sobre la tragedia que cobró la vida del futbolista Diogo Jota y su hermano André, desafiando la versión oficial de los hechos. Según Duarte, ambos estaban vivos y conscientes tras el accidente en la A52, clamando por ayuda mientras intentaban escapar de su Lamborghini en llamas. Este testimonio, grabado en video, ha desatado una ola de indignación y preguntas sobre la respuesta de las autoridades.
La mañana del accidente, el 6 de octubre, un Lamborghini Huracán Evo se salió de la carretera y chocó contra un guardarraíl, estallando en llamas casi de inmediato. Duarte, que pasaba por la zona, fue testigo de un horror inimaginable: los gritos de los hermanos resonaban mientras intentaban romper las ventanas del vehículo en llamas. Sin embargo, el informe oficial de la policía afirmaba que ambos habían muerto en el acto, una declaración que ahora parece ser un intento de encubrimiento.
El video de Duarte, que muestra a los hermanos pidiendo ayuda, contradice directamente esta versión. A pesar de su importancia, la policía inicialmente desestimó la grabación, sugiriendo que no complicara las cosas. Este silencio ha llevado a especulaciones sobre un posible encubrimiento, especialmente tras la aparición de un misterioso coche negro que supuestamente seguía al Lamborghini antes del accidente.
La muerte de Diogo y André ha dejado una marca indeleble en el mundo del fútbol, provocando un luto nacional en Portugal y un clamor por justicia. La comunidad exige respuestas y una revisión exhaustiva de las circunstancias que rodearon el accidente. La revelación de que los hermanos estaban vivos y luchando por escapar plantea serias dudas sobre la efectividad de la respuesta de emergencia y la transparencia de las autoridades.
La historia de Duarte no solo es un testimonio de valentía, sino también un llamado a la verdad en un caso que ha dejado a muchos con más preguntas que respuestas. La lucha por la justicia de Diogo y André continúa, y la presión sobre las autoridades para que actúen con integridad y transparencia se intensifica.