¡ESCÁNDALO EN COLOMBIA! Lina Garrido ha destapado un escándalo que sacude los cimientos del gobierno de Gustavo Petro. En una revelación explosiva, la representante a la Cámara por Cambio Radical ha puesto en el centro de la controversia al ministro del Interior, Armando Benedetti, y al presidente de la Cámara, Raúl Salamanca, tras una fotografía que ha encendido la furia de la oposición. Esta imagen, donde ambos políticos se abrazan justo después de la aprobación de la reforma pensional, ha generado un debate candente sobre la posible colusión entre el ejecutivo y el legislativo.
Con 97 votos a favor, la reforma pensional fue aprobada en un ambiente tenso, marcado por la reciente intervención de la Corte Constitucional que había señalado irregularidades en el proceso. Este abrazo, interpretado por algunos como un signo de celebración, ha sido visto por otros como un indicio alarmante de la erosión de la independencia de los poderes en Colombia. Garrido no se ha quedado callada; en redes sociales, cuestionó la autonomía del Congreso y advirtió sobre las consecuencias de este acercamiento.
La preocupación es palpable. La Corte Constitucional ahora tiene la responsabilidad de decidir si este proceso legislativo se realizó con las garantías necesarias. Si el tribunal da su visto bueno, el gobierno podrá implementar cambios críticos en el sistema pensional. Pero si encuentra más irregularidades, el futuro de la reforma podría estar en juego, generando un nuevo caos político.
Las reacciones no se han hecho esperar. Opositores como Hernán Kadavid han alzado la voz, denunciando que la aprobación de la reforma podría acarrear graves daños a mediano y largo plazo. La incertidumbre se cierne sobre el país, y el eco del abrazo entre Benedetti y Salamanca resuena como un símbolo de una crisis que podría ser solo el comienzo. ¡Colombia está en alerta máxima!