El viaje del presidente Gustavo Petro a Ecuador ha desatado una tormenta de controversias y especulaciones. La visita, que tenía como objetivo la ceremonia de posesión del presidente Daniel Novoa en Quito, se complicó con un inesperado traslado a Manta, generando rumores alarmantes, incluyendo una supuesta reunión con el narcotraficante alias Fito, que el gobierno colombiano ha desmentido rotundamente.
Un día antes de su partida, el Senado fue notificado de que el único destino del presidente sería Quito, sin ninguna mención de Manta. Sin embargo, fuentes del Congreso revelan que no es la primera vez que se enteran por los medios de comunicación sobre los movimientos del presidente, lo que plantea serias dudas sobre la legalidad de sus acciones. Según el artículo 196 de la Constitución, el presidente no puede trasladarse al extranjero sin previo aviso al Senado. Esta infracción podría interpretarse como abandono del cargo.
En Ecuador, el ministro del Interior confirmó que Petro llegó a una lujosa residencia en Manta, donde permaneció durante dos días sin salir, lo que ha alimentado aún más la especulación. A pesar de las preguntas sobre la falta de transparencia en la agenda del presidente durante esos días, el gobierno colombiano ha mantenido un silencio inquietante sobre este misterioso traslado.
La situación ha generado una creciente presión política, con el Congreso exigiendo explicaciones claras. Mientras tanto, la atención se centra no solo en Petro, sino también en el panorama político del Caribe, donde surgen nuevos precandidatos presidenciales, como el senador Mauricio Gómez Amine, cuya candidatura podría alterar el equilibrio de poder.
Este escándalo no solo pone en tela de juicio la gestión de Petro, sino que también deja entrever un clima de incertidumbre política en Colombia. La falta de claridad y comunicación en los viajes del presidente podría tener repercusiones significativas en su administración y en la confianza del público. La situación está en desarrollo y se espera que más detalles surjan en las próximas horas.