**OLIER: EEUU no puede dejar que Rusia se ponga de la mano de China porque sería la 3ª guerra mundial**
La situación en Ucrania se torna cada vez más crítica, con las tropas rusas acercándose a la zona de Sumi, mientras que Ucrania intenta resistir con lo que puede. Eduardo Lier, analista de conflictos, resalta que la guerra no muestra signos de detenerse; cada bando se aferra a sus capacidades, mientras las conversaciones de paz en Estambul no progresan. La guerra ha evolucionado en un conflicto de alta tecnología, donde los drones juegan un papel crucial, pero la superioridad territorial de Rusia se mantiene firme.
A medida que la lucha se intensifica, Lier advierte sobre la complejidad del escenario global. Estados Unidos, que ha perdido parte de su influencia, observa con preocupación el acercamiento entre Rusia y China. La posibilidad de una alianza entre estas dos potencias podría desatar un conflicto a escala mundial. Lier enfatiza que, para Washington, es fundamental evitar que Rusia se alinee completamente con China, ya que esto podría ser el catalizador de la Tercera Guerra Mundial.
El apoyo a Ucrania, aunque visible, es más profundo de lo que parece. Las potencias europeas, como Francia y el Reino Unido, están proporcionando asistencia en silencio, mientras que la Unión Europea enfrenta su propia debilidad geopolítica. La falta de unidad entre los países europeos les impide actuar como un bloque fuerte, dejando a Ucrania en una posición vulnerable.
La incertidumbre se agudiza con la posibilidad de que Estados Unidos, bajo una administración diferente, limite el suministro de armas a Ucrania, lo que podría desmantelar cualquier plan de ataque a territorio ruso. Así, la balanza entre las potencias se inclina hacia un futuro incierto, donde la falta de acción y unidad en Europa podría tener consecuencias devastadoras.
La situación es alarmante y exige atención inmediata. La guerra en Ucrania no solo afecta a esa nación, sino que también podría reconfigurar el equilibrio de poder global. La comunidad internacional debe actuar con rapidez para evitar un desenlace catastrófico que podría llevar al mundo al borde de una nueva guerra.