Juana Repetto ha decidido dar un paso audaz y significativo en su vida tras su reciente separación del padre de sus hijos. En un momento de vulnerabilidad y fuerza, la actriz ha regresado a vivir a la casa de su madre, un regreso que, aunque inesperado, refleja la complejidad del amor y la maternidad.
“Volví a la casa de mi mamá con mis hijos”, confesó Juana, compartiendo su experiencia de transición después de seis años de relación. A sus 36 años, esta madre de dos pequeños, Toro y Tito, revela que ha vivido ciclos de independencia y retorno a la calidez materna. Desde que se fue de su hogar a los 17 años, regresar con sus hijos marca una etapa diferente, cargada de emociones y recuerdos.
La decisión de mudarse no solo responde a la necesidad de un espacio acogedor, sino también a la búsqueda de apoyo y compañía durante este periodo difícil. “Es un momento complicado, pero estoy bien”, afirma Juana, reflejando una resiliencia que inspira. La vida en la casa de su madre no es solo un refugio; es un recordatorio de la fortaleza familiar que siempre ha estado presente en su vida.
Recordando su experiencia al dar a luz, Juana comparte anécdotas que muestran su conexión con la maternidad, eligiendo parir en casa y enfrentando los desafíos con determinación. “Cuando nació Toro, me fui a casa y me quedé seis meses con mi mamá”, dice con nostalgia y risa, dejando entrever la calidez de esos momentos.
En este nuevo capítulo, Juana Repetto no solo busca reconstruir su vida, sino también redescubrirse a sí misma, acompañada por el amor incondicional de su familia. Su historia resuena con muchas mujeres que enfrentan separaciones, recordándonos que, a veces, regresar a las raíces puede ser el primer paso hacia un futuro brillante.