En un giro trágico y escalofriante, la influencer Valeria Márquez fue asesinada en su salón de belleza en la colonia Real del Carmen, justo horas después de manifestar su inquietud en un live de TikTok. La joven de 23 años estaba esperando un regalo cuando, durante la transmisión, un espectador le advirtió sobre la presencia de un hombre sospechoso que había intentado dejarle un obsequio. Con una mezcla de sorpresa y miedo, Valeria expresó: “A lo mejor me iban a matar”, un presagio desgarrador que se convirtió en realidad minutos más tarde.
El fatídico evento ocurrió el pasado martes 13 de mayo, alrededor de las 18:30 horas. Según fuentes policiales, Valeria fue encontrada sin vida en su estética en la avenida Servidor Público. La policía municipal llegó rápidamente al lugar tras recibir un llamado de emergencia, pero lamentablemente, ya no había signos vitales en la joven.
La inquietante interacción en TikTok, donde Valeria mostró señales de preocupación, ha encendido las alarmas sobre la seguridad de los influencers y la creciente violencia que enfrentan. Los seguidores de la influencer están desconsolados y exigen justicia, mientras las autoridades investigan el crimen.
Este asesinato ha conmocionado a la comunidad y ha puesto en el centro del debate la protección de figuras públicas en el mundo digital. Con cada minuto que pasa, la urgencia por respuestas y justicia se intensifica. La vida de Valeria, llena de sueños y proyecciones, fue truncada de manera violenta, dejando un vacío imposible de llenar. La pregunta que todos se hacen ahora es: ¿cuántas más deben sufrir para que se tomen acciones efectivas contra la violencia?