**La voz del merengue se apaga: Lady Rosario rompe el silencio tras la muerte de Rubby Pérez**
En un giro desgarrador que ha conmocionado al mundo del merengue y a toda la República Dominicana, Lady Rosario, la novia del icónico Rubby Pérez, rompió su silencio sobre los trágicos momentos que precedieron a la muerte del artista. Su conmovedora revelación se convierte en un grito de justicia y amor, poniendo en evidencia la profunda conexión que compartieron en sus últimos días.
Rubby Pérez, conocido como la voz más noble del merengue, falleció hace 14 días en un accidente que dejó a muchos devastados. En un emotivo relato, Lady Rosario compartió las últimas palabras de su amado, un mensaje que resonó como una premonición: “Si algo me pasa, recuerda que viví la vida que quise al lado de quien más amaba”. Estas palabras, que ahora cobran un significado trágico, nos hacen cuestionar cómo pudo ocurrir una tragedia tan devastadora.
Lady Rosario, quien fue pareja de Rubby durante cinco años, ha revelado que su amor fue real y profundo, y lamenta no haber sido reconocida formalmente en los homenajes póstumos. “Me hicieron sentir invisible”, confiesa. Mientras el país se unía para rendir homenaje a Rubby, ella se enfrentaba al dolor de ser excluida y silenciada en un momento donde su voz debería haber sido escuchada.
La historia detrás de la muerte de Rubby Pérez no solo es una tragedia personal, sino también un recordatorio escalofriante de las negligencias que llevaron al colapso del escenario donde él actuaba. “No fue el destino, fue una cadena de errores humanos”, denuncia Lady Rosario. La estructura del lugar, previamente advertida por técnicos y músicos, colapsó, convirtiendo una celebración en un infierno.
A medida que el legado de Rubby se mantiene vivo en el corazón de sus fans, la voz de Lady Rosario se eleva en un llamado a no olvidar su historia de amor y lucha. “Los amores verdaderos no necesitan un contrato”, afirma, recordándonos que el amor trasciende más allá de los papeles.
En este homenaje, Lady Rosario no solo llora la pérdida de Rubby, sino que también celebra su vida y su música, invitando al mundo a recordar al hombre que vivió y amó con intensidad. Con cada recuerdo, su voz sigue resonando, y su legado perdurará como un faro de amor en la memoria colectiva.