Lewis Hamilton completó una remontada épica en su última carrera con Mercedes en el GP de Abu Dhabi, pasando del puesto 16 en la parrilla al cuarto al cruzar la bandera a cuadros.
El siete veces campeón del mundo fue 18º en la clasificación, pero se alineó en la P16 debido a las penalizaciones a otros corredores antes de cruzar la línea en cuarto lugar, adelantando a su compañero de equipo George Russell en la última vuelta con una maniobra que coronó su última obra maestra con las Flechas Plateadas.
Cómo se impuso el ‘tiempo del martillo’ para una última carrera
Hamilton comenzó la carrera con una estrategia de neumáticos diferente a la de los demás pilotos en la parrilla. Con el neumático duro, el objetivo de Mercedes para el último baile de su piloto estrella era disfrutar del aire limpio para demostrar el ritmo del W15 y del piloto británico.
El inicio no pudo ser mejor para Hamilton, que aprovechó los incidentes iniciales en la vuelta 1 entre Max Verstappen y Oscar Piastri en la curva 1 y posteriormente entre Sergio Pérez y Valtteri Bottas en la chicane de las curvas 6 y 7 para ascender hasta cuatro posiciones.
El primer stint con el neumático duro fue complicado y se quedó atrapado detrás de Liam Lawson durante casi 10 vueltas, perdiendo una amplia diferencia con Verstappen.
El piloto holandés tras su incidente con Piastri en la curva 1 continuó su carrera justo por delante de Lewis y con el neumático medio y un mejor ritmo inicial pudo remontar posiciones con más facilidad, aunque aún teniendo que recuperar 10 segundos de déficit en pista por ser ‘totalmente’ culpable como determinaron los comisarios en su accidente con el piloto de McLaren.
Por suerte para Lewis, Russell también se vio perjudicado. En su caso por Pierre Gasly en tercera posición. Al igual que en Qatar, la velocidad punta del Alpine volvió a demostrar ser el mayor enemigo de aquellos que buscaban remontar posiciones con un mejor ritmo de carrera.
Una vez que pudo superar a Lawson, la situación de carrera también jugó a favor de Hamilton. Pilotos como Gasly y Nico Hülkenberg que tuvieron que luchar entre sí por el 𝓈ℯ𝓍to puesto en el Campeonato de Constructores apostaron por una estrategia de dos paradas, que luego se convirtió en una estrategia de “supervivencia” de una parada.
De esta manera, permitieron a Mercedes explorar con Hamilton la opción de hacer una parada única, pero de forma optimizada.
Y esto también abrió la posibilidad de alargar al máximo el primer stint con el neumático duro en caso de que se desplegara un Virtual Safety Car o Safety Car. Una estrategia muy inteligente por parte del equipo de Brackley, que tenía un plan de carrera muy claro para Hamilton.
Incluso después de la parada temprana de Gasly en la vuelta 15, que dejó a Russell con aire limpio, Lewis empezó a tener un mejor ritmo con el neumático duro que él con el neumático medio, ya que a partir de la vuelta 18 Russell empezó a ser claramente más lento. Era el momento de empezar a pensar realmente en la parada en boxes para aquellos que tenían problemas como Russell y Verstappen con el neumático medio.
Estos son exactamente los datos que luego utilizaría el equipo de estrategia de Mercedes para evaluar el momento ideal para llamar a Hamilton a boxes para hacer su parada en boxes y aprovechar al máximo la vida útil del neumático medio en las últimas fases de la carrera, además con un coche más ligero debido al menor nivel de combustible en el interior del depósito del coche.
Russell entró en boxes en la vuelta 27, al igual que el líder de la carrera, y aunque volvió a estar a unas décimas de segundo de Gasly, pronto adelantó al francés en la vuelta de salida, cuando el piloto de Alpine ya había acumulado 12 vueltas con su neumático duro.
Alpine y Haas ya estaban enfrascados en su propia batalla. La diferencia entre Russell y Hamilton antes de esta parada en boxes era de 8,767 segundos.
Mientras tanto, Hamilton intentaba recortar distancias con Verstappen. El piloto de Red Bull tenía un buen ritmo, pero no lograba abrir una brecha que le permitiera compensar los 10 segundos de penalización que le impondrían en boxes en la vuelta 30 y, de esta forma, se quedaba definitivamente por detrás de Hamilton, que completaba el overcut.
Hamilton alargó su parada en boxes hasta la vuelta 35. Salió por detrás de Gasly y Hülkenberg con siete segundos de aire limpio, un neumático más blando y más de 20 vueltas más fresco que los pilotos de Alpine y Haas. La diferencia con Russell, que estaba por delante de estos dos pilotos y con el neumático duro de ocho vueltas, era de +17,691 segundos a falta de 22 vueltas.
Hamilton alcanzó y adelantó al piloto de Haas en la vuelta 41 y dos vueltas más tarde hizo lo mismo con Gasly para pasar a la P5 y reducir así la diferencia con Russell por debajo de los 13 segundos a falta de 15 vueltas.
Y fue aquí donde Lewis sacó su último ‘Hammer Time’ para Mercedes. Una clásica maniobra de Mercedes en el muro de boxes, jugando al cazador y la presa, esta vez contra su propio compañero de equipo.
El siete veces campeón del mundo finalmente dio caza a Russell en la última vuelta para hacerse con la P4. Y no lo hizo de cualquier manera. Lo hizo con un adelantamiento digno del premio de ‘adelantamiento del mes’ con un adelantamiento por el exterior de la curva 9 con una gran tracción de su neumático medio y tras haber aprovechado el efecto DRS y rebufo del monoplaza de su compañero.
Hamilton no tuvo rival en el segundo stint. El heptacampeón del mundo fue con diferencia el piloto más rápido en pista en cuanto a ritmo medio gracias a la ventaja de contar con un neumático más blando y diferencialmente más fresco.
Tras empezar la carrera en la 16ª posición, Hamilton y Mercedes coronaron la asociación más longeva entre un piloto y un equipo en la Fórmula 1 maximizando sus posibilidades y logrando el mejor resultado posible en su última carrera juntos en Abu Dhabi.
Hamilton superó a Russell en su último baile, aunque esta temporada el futuro nº 1 de Mercedes le ha superado tanto en clasificación como en el cara a cara. Ningún otro compañero de Hamilton había conseguido esto antes en 18 años.
Aun así, este último espectáculo debería ser un gran impulso de confianza y motivación antes de que Hamilton cambie el plateado por el rojo Ferrari a partir de la temporada 2025 de F1. Hamilton no ha olvidado que es un piloto rápido y lo demostró nuevamente en el circuito de Yas Marina.