**Irán lanza una advertencia nuclear: la tensión global se intensifica**

En un giro alarmante de los acontecimientos, Irán ha elevado su nivel de alerta nuclear, afirmando que sus fuerzas armadas están en máxima preparación ante posibles agresiones. Esta declaración se produce en medio de un clima de creciente tensión tras las recientes afirmaciones del expresidente de EE. UU., Donald Trump, quien advirtió que el conflicto entre Israel e Irán podría reavivarse en cualquier momento.

Irán ha roto su cooperación con la Agencia Internacional de Energía Atómica, señalando que sus instalaciones nucleares han sufrido daños significativos tras los ataques aéreos de Estados Unidos. El Ministerio de Relaciones Exteriores iraní enfatizó que no se puede confiar en las promesas de Israel y que la nación debe estar “extremadamente vigilante” en los días venideros.

Mientras tanto, Trump ha presionado a la OTAN para que todos sus aliados aumenten su gasto militar al 5% del PIB, lo que ha generado tensiones dentro de la alianza. La respuesta de España ha sido cautelosa, ya que el presidente Pedro Sánchez defiende que el gasto actual es suficiente.

La situación se complica aún más con la amenaza de Trump de imponer sanciones comerciales a España, lo que podría desatar una nueva crisis económica. En este contexto, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha comparado la intervención de Trump en el conflicto con un padre que debe intervenir en una pelea infantil.

Las imágenes de la devastación en Irán son impactantes: más de 600 muertos y miles de heridos tras los ataques israelíes, mientras el parlamento iraní intensifica su retórica contra Estados Unidos e Israel. La comunidad internacional observa con creciente preocupación cómo se despliega este escenario de inestabilidad, con la posibilidad de que la guerra se extienda más allá de las fronteras de Irán.

La tensión entre las potencias nucleares y el futuro de la paz en la región están en juego, y el tiempo corre. La comunidad global debe actuar con rapidez para evitar que esta situación se convierta en un conflicto de proporciones devastadoras.