¡NOTICIAS DE ÚLTIMA HORA! Un incidente que parecía rutinario durante el Gran Premio de Canadá se ha transformado en una tormenta política en la cúpula de la Fórmula 1. George Russell cruzó la línea de meta en primer lugar, pero lo que ocurrió detrás del coche de seguridad ha desatado acusaciones, protestas y una guerra de palabras entre Red Bull y Mercedes.
El caos comenzó cuando Lando Norris colisionó con Oscar Piastri, provocando la salida del coche de seguridad. Con solo unas vueltas por delante, Russell lideraba, seguido de Max Verstappen. Sin embargo, el verdadero drama estalló en un momento de confusión: Russell frenó bruscamente, lo que llevó a Verstappen a sobrepasarlo momentáneamente. Russell, sintiéndose agraviado, se comunicó con la dirección de carrera, alegando que Verstappen lo había adelantado bajo el coche de seguridad.
Red Bull no tardó en reaccionar, presentando no una, sino dos protestas oficiales, acusando a Russell de comportamiento errático y de tener una intención antideportiva. Aunque los comisarios desestimaron las quejas, el conflicto no se detuvo ahí. Toto Wolff, jefe de Mercedes, calificó las acciones de Red Bull como “ridículas”, mientras que Verstappen, sorprendentemente, optó por la calma, describiendo el incidente como una simple confusión.
La tensión entre Verstappen y Russell, que ya había comenzado a crecer tras su choque en Barcelona, ahora se intensifica. Russell, con su victoria en Canadá, se acerca peligrosamente a Verstappen en la clasificación, lo que añade más combustible a esta rivalidad en llamas.
Con el futuro de Verstappen en la cuerda floja, a solo un punto de penalización de una suspensión, la batalla psicológica entre estos titanes de la F1 podría definir no solo la temporada, sino también su legado. La FIA ha cerrado el capítulo de las protestas, pero el verdadero juicio se está llevando a cabo en la opinión pública y en el paddock. ¿Estamos ante el inicio de una guerra psicológica que podría costarle a Verstappen más que solo una victoria? ¡La tensión está en el aire!