¡Impactante! La ex amante de Rubby Pérez, Michelle, rompe el silencio 15 días después de su muerte, desatando un tsunami de emociones y controversias. En un relato desgarrador, revela la complejidad detrás de su relación con el icónico merenguero, quien dejó un legado musical inmenso pero también un trasfondo de dolor familiar. Michelle, quien había permanecido en las sombras, ahora se enfrenta al escándalo que ha surgido tras la muerte de Rubby, donde la infidelidad y las luchas familiares han tomado el centro del escenario.
Con lágrimas en los ojos, Michelle comparte su verdad: “Mi hija no fue un error, fue una bendición. Rubby la amó, y yo lo viví en carne propia”. Su declaración resuena fuerte, reclamando un espacio para su hija, fruto de un amor verdadero, aunque no reconocido. En medio del tumulto mediático y el juicio público, ella pide respeto y comprensión, revelando que lo que ocurrió en el funeral de Rubby fue un intento de paz, no el espectáculo que han presentado los medios.
Mientras su hija mayor, Sulinka, ha intentado construir una narrativa de dolor y traición, Michelle se presenta como una madre que solo busca proteger la dignidad de su hija. “Detrás de cada rumor hay una verdad a medias”, expresa, enfatizando que su historia no debe ser reducida a un simple escándalo. Su voz, que antes era un susurro, ahora exige ser escuchada, rompiendo el silencio que la había mantenido cautiva durante años.
La muerte de Rubby Pérez no solo ha dejado un vacío en la industria musical, sino que ha reavivado viejas heridas en una familia ya fracturada. Michelle, con su valentía, hace un llamado a la empatía: “Cuando el silencio se rompe, ya nada vuelve a ser igual”. Este relato no es solo sobre Rubby, sino sobre el amor, la verdad y las múltiples versiones de una historia que merece ser contada. ¿Estamos listos para escuchar?