**Impacto y Dolor: El Último Adiós a Valeria Márquez**

El 13 de mayo de 2025, la influencer mexicana Valeria Márquez fue víctima de un brutal asesinato durante una transmisión en vivo en su salón de belleza en Zapopan, Jalisco, un crimen que ha dejado a la sociedad en shock y ha puesto de relieve la alarmante violencia de género en México. A tan solo un día de su muerte, el 14 de mayo, se llevó a cabo su funeral en la funeraria latinoamericana de Guadalajara, donde familiares y amigos cercanos se reunieron para despedir a la joven de 23 años en un ambiente de profundo dolor y hermetismo.

El funeral, que se caracterizó por su exclusividad, permitió el acceso únicamente a quienes contaban con brazaletes azules. Los asistentes, todos vestidos de blanco, recordaron a Valeria como una mujer llena de vida y alegría. Sin embargo, la tristeza fue palpable cuando su abuelo compartió su devastación al enterarse de la verdad detrás de la fatal noticia, inicialmente disfrazada de un accidente.

En un toque desgarrador, Javier Seriani, reconocido periodista, publicó en su cuenta de Instagram imágenes del féretro de Valeria, adornado con rosas blancas, rosas rojas y un peluche de cerdito que le había sido regalado poco antes de su trágica muerte. La conmovedora frase “Nunca me soltó” se destacaba en la imagen, simbolizando el amor y el apego que sus seres queridos sentían por ella.

Mientras la Fiscalía de Jalisco investiga el caso bajo el protocolo de feminicidio, aún no se han identificado sospechosos, lo que ha generado un llamado urgente a las autoridades para garantizar la seguridad de las mujeres en el país. El asesinato de Valeria no solo ha afectado a su círculo íntimo, sino que ha encendido un debate nacional sobre la creciente violencia que enfrentan las mujeres en México, un recordatorio escalofriante de la lucha que todavía queda por delante.

La comunidad se encuentra en luto, pero también en pie de lucha, exigiendo justicia y un cambio real en la protección de las mujeres. La historia de Valeria Márquez es una tragedia que resuena más allá de su vida, convirtiéndose en un símbolo de la urgente necesidad de poner fin a la violencia de género en el país.