La reina Letizia enfrenta un momento de crisis extrema en Valencia tras ser abofeteada por una madre desesperada que perdió a su hija en la tragedia de la DANA. En un evento marcado por la conmoción y la ira de los afectados, la llegada de los Reyes y del presidente Pedro Sánchez a Paiporta fue recibida con gritos de “asesinos” y exigencias de dimisión.
La situación es crítica: más de 216 fallecidos y 15,000 personas sin electricidad desde hace días. La falta de asistencia y respuesta efectiva ha desatado la indignación de los ciudadanos, quienes no dudaron en expresar su frustración al ver a los líderes del país en medio de la devastación.
En medio de la multitud, una madre, visiblemente afectada, se acercó a la reina Letizia. Con el dolor a flor de piel, le relató cómo tuvo que recuperar el cuerpo sin vida de su hija de entre los escombros de su hogar. Este desgarrador encuentro culminó en un momento de tensión cuando, en un acto de desesperación, la mujer manoteó hacia la reina, tocando su rostro en medio de la protesta.
Los miembros de seguridad intervinieron rápidamente, manteniendo la calma en un ambiente ya de por sí tenso. La multitud, que clamaba por ayuda y atención, reflejó la verdadera crisis que enfrenta la región: un llamado urgente a la acción en un momento donde la esperanza parece desvanecerse.
La reina, visiblemente afectada por la situación, se enfrenta a una de las pruebas más difíciles de su reinado. La presión sobre el gobierno y la monarquía aumenta, mientras los ciudadanos continúan luchando por sobrevivir en medio de la devastación. La urgencia de la situación no puede ser ignorada; el tiempo corre y las vidas están en juego.
