¡TIEMBLA DE MIEDO, ADRIANA CAMARGO! LA FISCALÍA DESMANTELA SU VÍNCULO CON RAMÓN GONZÁLES.

¡TIEMBLA DE MIEDO ADRIANA CAMARGO! La Fiscalía General de la Nación ha desmantelado el vínculo de la fiscal Luz Adriana Camargo con el escándalo de corrupción más impactante en Colombia. Carlos Ramón González, exdirector del DAPRE, ha logrado escapar a Nicaragua antes de ser capturado, y todo indica que su fuga fue facilitada desde dentro de la misma entidad que debía arrestarlo.

La Comisión de Acusaciones del Congreso ha exigido a Camargo un informe detallado en un plazo de 15 días, tras denuncias de omisiones y retrasos que permitieron a González evadir la justicia. Las alarmas han sonado: ¿cómo es posible que un alto funcionario escape justo cuando la justicia se acerca?

El escándalo no se detiene ahí. César Mandique, otro implicado que también está en la mira, ha logrado evadir la acción judicial. La presión sobre Camargo aumenta, y su credibilidad se encuentra en la cuerda floja. La congresista María Eugenia Lopera, cercana al presidente Gustavo Petro, ha liderado esta investigación, pero su imparcialidad es cuestionada por sectores políticos y analistas.

Las acusaciones son graves: abuso de función pública y favorecimiento a investigados. Pablo Bustos, miembro de una red de veedurías, ha denunciado que Camargo permitió retrasos procesales que facilitaron la fuga de González. Se habla de un patrón de irregularidades que podría implicar a altos funcionarios del Estado en un entramado de corrupción sin precedentes.

González solicitó asilo en Nicaragua antes de que se emitiera la orden de captura en su contra, lo que plantea serias dudas sobre la integridad del proceso judicial. La comunidad internacional observa con atención, y la presión sobre la fiscal Camargo crece. Las instituciones democráticas de Colombia están en juego, y la sociedad exige respuestas claras y contundentes.

La comparecencia de Camargo ante la Comisión de Acusaciones no es un trámite más; es un momento crucial que podría redefinir el futuro de la justicia en el país. El tiempo corre, y la ciudadanía está atenta, esperando que la verdad prevalezca sobre la impunidad. La lucha contra la corrupción es una tarea de todos, y este escándalo podría ser el punto de inflexión que Colombia necesita. La historia nos juzgará por nuestras acciones en este momento decisivo.