Tras los desgarradores sucesos de El Exorcista: Creyente, una joven, liberada de las garras de una entidad demoníaca, comienza a sufrir visiones aterradoras y desmayos violentos. Su madre, aún traumatizada por la experiencia, teme que el mal haya regresado. Pero esta vez, se siente más antiguo, más oscuro y mucho más astuto.Cuando una serie de asesinatos rituales sacude su pueblo, los símbolos tallados en cada escena del crimen coinciden con los dibujos que la niña dibuja en sueños. Al darse cuenta de que no puede ser una coincidencia, la desesperada madre busca la ayuda del Padre Bennett (Leslie Odom Jr.), ahora un exorcista experimentado que ha luchado contra las posesiones en todo el mundo.
Sin embargo, Bennett le advierte: este no es un caso común. El demonio en acción forma parte de una legión mayor, una que se ha estado preparando durante décadas para irrumpir plenamente en el mundo mortal. Para afrontarlo, Bennett recurre a dos aliados improbables: Gabriel Ward (Tom Hardy), un exsacerdote convertido en un empedernido cazador de demonios, y el padre Marcus Vale (Keanu Reeves), un solitario exorcista del Vaticano cuyos rituales tranquilos y metódicos ocultan toda una vida de tormento personal. La fuerza bruta de Gabriel y sus tácticas poco ortodoxas chocan con el enfoque disciplinado y ritualista de Marcus, forjando una alianza tensa pero formidable.A medida que profundiza su investigación, el trío descubre una escalofriante profecía: la niña no está simplemente poseída, sino que es el recipiente elegido para el “Redentor”, un avatar demoníaco capaz de propagar la corrupción en poblaciones enteras. La entidad comienza a explotar sus miedos más profundos, obligando a Gabriel a revivir el exorcismo fallido que lo alejó de la Iglesia y confrontando a Marcus con visiones inquietantes de la única alma que jamás pudo salvar.